Es posible que estés buscando la clave para trabajar desde casa pero que te abrume la cantidad de información que hay sobre empleos en remoto y cómo vivir online, ya sea con tu propio negocio o con un contrato.

Has leído y visto vídeos sobre trabajar desde tu hogar sin experiencia, los mejores empleos para trabajar en remoto, cómo conseguir un trabajo online… y un largo etcétera.

Pero tú lo que quieres saber es el CÓMO paso a paso.

¿Por dónde empezar? ¿Qué es lo primero que tienes que hacer? ¿Cómo elegir el empleo en remoto ideal para ti?

Pues de todo esto y mucho más te hablamos en este artículo, quédate que te lo contamos.

Y aunque no tengas experiencia todavía en este tipo de empleo deslocalizado, que puedes realizar desde donde quieras, déjanos decirte que SÍ puedes hacerlo porque estamos en el mejor momento de la historia para conseguirlo.

Venga, vente con nosotros que empezamos.

Cómo empezar a trabajar desde casa

Si todavía no te has lanzado al mundo laboral remoto, empezamos contándote los pasos que deberías seguir para empezar.

Paso 1

Lo primero que tienes que hacer es una lista de cuáles son tus habilidades a día de hoy y tus intereses.

Esto te va a ayudar a postularte para empleos que puedes realizar ya (porque tienes las habilidades necesarias), aunque ahora mismo no tengas experiencia laboral.

Y lo siguiente sería fijarte en cuáles son tus intereses, para que ese trabajo realmente te haga sentirte bien y realizado cuando lo hagas.

Paso 2

Decide si estás buscando un trabajo de media jornada (o a tiempo parcial) o si buscas un puesto a jornada completa.

Esto es muy importante para filtrar las ofertas cuando te pongas a buscar y no perder tu tiempo.

En caso de que estés buscando trabajar desde casa y aún no tengas experiencia o no sepas si este estilo de vida te va a gustar, prueba primero a tiempo parcial.

Esto también es buena opción si tienes un trabajo convencional (presencial) y no te atreves a dar el paso del todo porque no sabes si esta forma de trabajar es para ti.

En este caso, puedes empezar trabajando unas horas en casa. Para ello, tienes dos opciones. Primero, puedes buscar un trabajo a tiempo parcial que te permita combinarlo con el que ya tienes. De este modo, podrás hacerte una idea más realista de lo que implica el trabajo en casa.

La otra alternativa es pedirle a tu empresa, siempre que sea posible por el tipo de trabajo, que te deje hacer una prueba de teletrabajo, por ejemplo, un par de semanas. Así, las dos partes veréis si las cosas van bien antes de dar el salto definitivo.

Paso 3

Elige el tipo de trabajo que quieres realizar.

¿Quieres trabajar para una empresa? ¿Te apetece dar el paso y ser tu propio jefe? ¿Te gustaría emprender con un negocio online?

Una vez tengas la respuesta a esas preguntas, debes hacerte otras.

¿En qué sector quieres trabajar? ¿Tienes la experiencia o los conocimientos necesarios para empezar (si es que hace falta que los tengas)?

Paso 4

Ponte manos a la obra. A veces, este es el paso más difícil, por miedos, por inseguridades… y acabas con la parálisis por análisis.

Es decir, que nunca te lanzas porque estás en una fase permanente de análisis de todos los factores: ¿es el sector adecuado?, ¿tendré la misma productividad que en la oficina?, ¿seré capaz de tener una buena conciliación?, ¿me sentiré solo/a trabajando así?…

Es normal tener dudas. Pero no deberías dejar que te frenen a dar el paso si de verdad quieres probar esta modalidad de trabajar.

Para ayudarte con todo esto, te recomendamos que sigas leyendo esta guía con la que tendrás respuesta a muchas de esas dudas.

Tipos de trabajos desde casa

Existe la creencia de que solo teletrabajan los empresarios o los nómadas digitales, aunque este pensamiento está cambiando en los últimos años. Hay más opciones y te las contamos a continuación.

1. Asalariado/a

Es el «trabajo de toda la vida» en el que una persona contratada trabaja para una empresa (o persona). La diferencia aquí es que no es necesario ir a la oficina o lugar de trabajo para desarrollar la actividad. Por ello, se conoce como trabajo en remoto o teletrabajo.

Las peculiaridades de este trabajo es que es posible que tengas que seguir algunas pautas que marca la empresa, como estar disponible en algunas horas concretas para posibles reuniones o llegar a ciertas horas trabajadas al final de la semana.

La gran ventaja de este modelo es que te aseguras un salario estable todos los meses (con matices, porque sabemos que no hay nada seguro) y que no tienes que estar pendiente de conseguir X clientes o vender Y productos. Todo esto con muchas más libertades que si tuvieras que trabajar de forma presencial. Si la empresa está de acuerdo, puedes incluso trabajar desde cualquier parte del mundo.

2. Autónomo/a

Otra forma de trabajar desde casa es siendo autónomo/a o freelance. En este caso, eres tu propio jefe: tu decides tus horarios, tus vacaciones, los clientes con los que trabajar o las fuentes de ingresos que generar…

La diferencia con el anterior es que tienes mucha más libertad en todos los aspectos, ya que no debes cumplir horarios, jornadas o la necesidad de residir en un país concreto. Es ideal para ser nómada digital.

Ahora bien, siendo freelance hay muchas más incertidumbres y preocupaciones, ya los ingresos dependen directamente de ti: si un mes no tienes trabajo, no habrá ingresos. Sin embargo, que tu salario no sea fijo también puede ser positivo, ya que no hay límite para crecer.

3. Empresario/a

Otra de las posibilidades que tienes para trabajar desde donde quieras es ser empresario/a o emprendedor/a digital, que sería una evolución de lo anterior y, a veces, es difícil distinguir.

Generalmente, ser emprendedor/a digital implicaría tener cierta estructura empresarial (aunque no es necesario que crees una empresa como tal), con varios empleados o personas que trabajan para ti como freelance. También es habitual en esta figura tener varias fuentes de ingresos, como diferentes productos o servicios.

Al igual que como freelance, como empresario/a eres tú quien gestiona tu tiempo y de ti o de tus decisiones dependerá el dinero generado. Tendrás más responsabilidad, ya que habrá personas que dependan de ti, tanto en lo económico como en lo laboral (necesitarán formación, asignación de tareas, control, etc.).

Siendo emprendedor/a digital también podrás trabajar desde casa y desde cualquier parte del mundo. Solo tendrás que asegurarte de que dedicas tiempo a la gestión de tu equipo y a hacer las tareas necesarias para que todo salga adelante.

Mejores profesiones para trabajar desde casa

Cada vez son más los trabajos que se pueden hacer desde casa o desde cualquier otra parte. De hecho, tenemos un artículo con los mejores empleos para trabajar desde casa que tiene muchas sugerencias interesantes.

Para que te vayas haciendo una idea de qué trabajos puedes encontrar, hemos seleccionado ejemplos de los mejor pagados y de los que se pueden hacer sin experiencia.

Empleos remotos mejor pagados

Aquí tienes cinco de los trabajos remotos con mejores salarios. Estos sueldos están basados en la media de las ofertas que hemos analizado para puestos en España.

• Digital Project Manager (sueldo de 30 000 € a 40 000 €): o gestor/a de proyectos digitales. Es el nexo entre el cliente y la empresa y se encarga de planificar, controlar y liderar los proyectos, así como de gestionar los recursos materiales, personales y financieros. Conlleva mucha responsabilidad. Tienes más detalles en el artículo sobre el empleo de project manager.
• Closer de ventas (salario desde 30 000 €): se encarga de cerrar una venta y es una figura imprescindible en muchas empresas. El sueldo suele basarse en comisión por venta (entre el 5 y el 10 %) y las cantidades varían mucho dependiendo del precio del producto o servicio (por ejemplo, comisiones de 200 € por formaciones, de 1000 € en bienes raíces, etc.).
• Media buyer (salario de 25 000 € a 40 000 €): es la persona que se encarga de planificar, ejecutar y supervisar la estrategia de publicidad digital de una marca. Los objetivos son conseguir tráfico web que se convierta en clientes o ventas. Se requieren conocimientos de marketing, embudos de venta, SEM y copywriting.
• Programador/a (sueldo de 24 000 € a 40 000 €): es la persona que se encarga de crear softwares o aplicaciones usando lenguajes de programación (Java, Python, C++, PHP…). Cada vez hay más empresas que quieren desarrollar programas, por lo que es una profesión muy demandada.
• Analista de datos (salario de 22 000 € a 40 000 €): o data analyst. Se encarga de analizar grandes conjuntos de datos para identificar tendencias y patrones. Debe saber manejar bases de datos, herramientas de análisis, conocer lenguajes de programación (como Python, R, SAS, SQL…) y elaborar modelos predictivos.

Tienes más sugerencias de empleos bien pagados que se pueden hacer desde casa o desde cualquier sitio en el siguiente vídeo.

Trabajos remotos que puedes hacer sin experiencia

Estos son cinco ejemplos de empleos desde casa para los que no necesitas tener experiencia previa ni conocimientos demasiado específicos.

• Asistente virtual: es muy versátil y no requiere conocimientos específicos. Sus funciones dependen de la empresa o persona para la que trabaje, pero suelen ser administrativas o de soporte. Es recomendable saber usar los programas más habituales del entorno digital y tener habilidades de comunicación y de organización. Si te interesa este empleo y quieres formarte para tener más opciones laborales, te recomendamos nuestro curso de Asistente Virtual y Project Manager.
• Atención al cliente: o servicio al cliente. Hace tareas centradas en lidiar con los clientes (responder preguntas, gestionar quejas o procesar pedidos,…). Lo habitual es que tengas muy buenas habilidades de comunicación y de resolución de problemas y que seas una persona organizada.
• Transcripción de audio o vídeo: para este trabajo, no necesitas conocimientos técnicos avanzados o habilidades complicadas. Los requisitos son tener buena ortografía y teclear rápido. Aquí, lo habitual es cobrar por minuto de vídeo o audio transcrito y no se suele bajar de 1€ por minuto. En una empresa, el salario ronda los 15 000 € al año.
• Profesor/a online: es ideal si te gusta dar clases y tienes buenos conocimientos sobre un tema en concreto. Te permite combinarlo fácilmente con otro trabajo. En este caso, no necesitarás habilidades especiales, más allá de los conocimientos sobre el tema que vayas a enseñar. Puedes dar clases por Zoom, Meet o Skype o grabar cursos y venderlos en plataformas como Udemy, Skillshare o en tu propia web.
• Setter digital: o appointment setter. Es la persona encargada de hacer el primer contacto con clientes potenciales para concretar citas de venta. Usarás herramientas como las redes sociales, el correo electrónico o similares. El salario suele empezar en los 19 000 € y puede llegar a más de 30 000 €.

Dónde encontrar trabajo desde casa

Tengas o no claro a qué quieres dedicarte, hay muchas webs o portales en los que puedes encontrar ofertas de empleo para personas que quieren trabajar de forma remota.

Algunas de las más destacadas del momento son:

• Freelancer: es muy conocida y existe versión totalmente en español. Puedes buscar trabajo y publicar ofertas para encontrar a trabajadores/as. Hay ofertas de sectores muy variados, aunque abundan las de desarrollo web, móvil y diseño.
• Remotive: está en inglés y la mayoría de ofertas son de empresas estadounidense, aunque también hay de otros países. El mayor foco es el sector tecnológico. La función de búsqueda no es tan avanzada, pero en el listado de propuestas sí que te muestra la información.
• Working Nomads: también está en inglés y muchas de las ofertas son del sector tecnológico. La plataforma intenta que las ofertas de trabajo publicadas sean lo más fiables posible.
• SoyFreelancer: está centrada en personas que quieren trabajar como autónomos en lugar de como asalariados. Hay ofertas de áreas muy variadas (diseño, fotografía, programación, música…). Además, está en español y se centra en el mercado hispano.
• RemotoJOB: es una gran comunidad en español de profesionales que teletrabajan donde puedes encontrar muchas ofertas. Muchas son del ámbito tecnológico, pero las hay para gente que busca trabajar en marketing, SEO, ventas, creación y edición de contenido, etc.

Tienes muchas más sugerencias e información sobre plataformas de este estilo en nuestro artículo de las mejores páginas para buscar trabajos remotos.

Empresas que están buscando trabajadores en remoto

Te hemos hablado de algunos de los empleos más interesantes y de plataformas donde puedes encontrar ofertas de trabajo remoto.

Ahora, vamos un paso más allá y te dejamos algunas empresas que buscan empleados para teletrabajar desde cualquier parte del mundo.

• Binance (empresa del sector de criptomonedas y finanzas)
• Welocalize (compañía del sector de la traducción y localización)
• Liveops (empresa de externalización y deslocalización de servicios)
• FluentU (plataforma online para aprender idiomas)
• Kraken (empresa del sector de criptomonedas y blockchain)
• AG1 (startup del sector de la salud y la suplementación)
• KnowmadMood (empresa del sector tecnológico)
• TopTal (empresa de recursos humanos)
• Babel (tecnológica especializada en soluciones de transformación digital)
• Joinrs España (empresa de recursos humanos enfocada a talento joven)
• GrowPro (startup de experiencias educativas internacionale)
• Storyteller (plataforma todo en uno para gestión de redes sociales)

Son empresas localizadas en diferentes partes del mundo, por lo que, en algunos casos, será necesario que hables inglés para optar a sus diferentes puestos. Aún así, las hay que con español será suficiente.

Qué necesitas para teletrabajar

Técnicamente, vas a necesitar muy poco para trabajar de forma remota. Con un ordenador y buena conexión a internet, ya puedes hacer muchísimas tareas. Todo va a depender de las funciones que tengas.

Ahora bien, si quieres profundizar un poco más y mejorar tu entorno digital de trabajo o formarte para poder acceder a trabajos mejor pagados, la información de esta sección te va a venir muy bien.

La hemos dividido en dos partes. Por un lado, las herramientas que te van a facilitar mucho el desempeño de tu trabajo en el día a día. Y, por otro lado, estudios o formaciones que te van a dar un plus en el mercado laboral.

Herramientas y aplicaciones para trabajar desde casa

En primer lugar, vamos a ver algunas aplicaciones para trabajar remotamente que te van a venir muy bien, tanto para comunicarte como para organizarte y tener más productividad.

La gran mayoría son aplicaciones para trabajar desde casa gratis o que tienen planes gratuitos que te dan muchas de las funcionalidades que nos interesan.

Herramientas de comunicación

Son las que utilizamos para comunicarnos de forma instantánea con nuestro equipo o con clientes. Algunos ejemplos según el tipo de comunicación son:

• Por escrito: Slack, Chat de Google o Skype
• Por vídeo: Meet, Zoom o Skype

Herramientas de organización

Son las apps para trabajar desde casa que te ayudan a organizar proyectos, tareas, personas, tiempo y, en algunos casos, documentos. Te dejamos con algunas de las más usadas:

• Trello, Asana, Jira, KanbanFlow, Clockify o Notion

Herramientas de almacenamiento de archivos

Sirven para guardar los documentos en la nube y poder acceder a ellos desde cualquier dispositivo (algo muy útil si se te estropea el ordenador y empiezas a trabajar con otro nuevo). Además, son muy útiles para compartir archivos con otras personas, como colegas de trabajo o clientes. Las más utilizadas son:

• Drive, OneDrive o Dropbox

Herramientas de seguridad

La seguridad es uno de los temas más delicados en el entorno digital, ya que podemos tener acceso a documentos muy importantes o a plataformas con información delicada. Por ello, es importante ser consciente de los accesos que tenemos y usar herramientas para guardar las contraseñas de forma segura. Las más efectivas son:

• Lastpass, Dashlane o Keeper

Herramientas específicas de tu trabajo

Por último, dependiendo de qué tareas vayas a desempeñar, necesitarás (o será recomendable) tener aplicaciones más concretas. Por ejemplo:

• Final Cut Pro o Adobe Premiere si editas vídeos
• Herramientas SEO (Ahrefs, SemRush, etc.) si te dedicas a este sector
• Photoshop o Lightroom si editas fotos
• Herramientas de e-mail marketing si te dedicas a los funnels
• Etc.

En algunos casos, puede que no necesites tener las herramientas en sí, ya que el cliente o la empresa te da acceso a ellas, pero sí que tendrás que saber usarlas.

Para profundizar más en este apartado, conocer otras herramientas y ver consejos muy útiles para usarlas y para tener un buen entorno de trabajo digital, te recomendamos esta superclase de herramientas gratuitas para teletrabajar.

Qué estudiar para trabajar desde casa

Antes de entrar en detalle, te recordamos que no es imprescindible tener estudios para empezar a trabajar desde casa, como te hemos contado en el apartado de «Trabajos remotos que puedes hacer sin experiencia». Por lo tanto, esto no debe ser un impedimento para que te lances.

Ahora bien, es cierto que, en muchos casos, cuanto más conocimientos tengas, más probabilidades tendrás de encontrar trabajo o de que puedas pedir más dinero por él.

Estos conocimientos no siempre se adquieren con formación. Muchos de ellos los vas a ir consiguiendo con experiencia (y no solo laboral, sino con proyectos propios). Aún así, queremos recomendarte algunos conocimientos, habilidades o formaciones que estudiar para trabajar online que creemos que harán que tu perfil destaque.

Hard skills

Son las habilidades o competencias duras que reflejan el conocimiento técnico de un profesional y que le ayudan a desempeñar con éxito un trabajo. En este ámbito, recomendamos:

• Marketing y sus diferentes ramas (e-mail marketing, SEO, SEM, redes sociales…)
• Storytelling y copywriting
• Análisis de datos
• Lenguajes de programación (JavaScript, HTML, Python, SQL, C++…)
• Inteligencia artificial (para empezar, puedes leer este tutorial de ChatGPT)
• Inglés, entre otros idiomas, te abre puertas a empresas extranjeras con mejores sueldos (hay muchas formas de aprender inglés online)

En la Escuela Nómada Digital, tenemos formación con la que puedes aprender sobre estas áreas y otras que estudiar para trabajar por internet.

Aquí tienes nuestros propios cursos para aprender a trabajar desde casa. 😉

Sobre este tema, nos gustaría recalcar que es importante estar siempre en constante formación. En un mundo que cambia tanto y tan rápido, es muy fácil que te quedes atrás y que lo que sabes hoy no se pueda aplicar mañana.

Esto no quiere decir que estés haciendo cursos constantemente, pero sí que tengas una mentalidad abierta siempre a seguir aprendiendo. Por supuesto que la formación con cursos online es ideal, pero también puedes hacerlo leyendo libros sobre diferentes temáticas, escuchando pódcasts interesantes o viendo vídeos de profesionales del sector, por ejemplo.

Soft skills

Por otro lado, están las habilidades blandas, que son aquellas competencias personales y sociales que facilitan las relaciones interpersonales. Las más útiles en el mundo online son:

• Buena comunicación
• Trabajo en equipo
• Autonomía y proactividad
• Organización del tiempo
• Adaptabilidad
• Capacidad de tomar decisiones

Estas habilidades no se estudian como tal, pero sí que puedes aprender a desarrollarlas y mejorarlas para tener un perfil laboral más completo.

Por qué trabajar desde casa: ventajas y desventajas

Ya te las contamos en detalle en el artículo sobre las ventajas y desventajas de trabajar desde casa, pero te las recordamos a continuación para que las tengas presente.

Pros del trabajo remoto

Vamos a empezar por las características que hacen que estos empleos sean tan interesantes y te los recomendemos constantemente.

• Flexibilidad horaria: en muchos trabajos remotos tienes la opción de elegir cuándo empezar y cuándo acabar a trabajar. Por eso, puedes adaptar tu trabajo a tu vida (hobbies, compromisos, estudios…) y no al revés. Y también tienes libertad de trabajar cuando tengas más energía y productividad. Gestionar tus propios horarios te da una libertad que no tiene precio.
• Autonomía y control: tú mandas en tu espacio laboral y, generalmente, en la gestión de tus tareas y proyectos, puesto que las empresas que ofrecen teletrabajo son más flexibles en estas áreas. Gracias a ello, tendrás más motivación y satisfacción laboral. Además, no tendrás que preocuparte por las distracciones típicas de una oficina, aunque debes controlar otro tipo de tentaciones de tu entorno remoto.
• Ambiente de trabajo personalizado: puedes personalizar tu espacio de trabajo según tus necesidades y preferencias, tanto decorativas como motivadoras (adelante, pon un cuadro con esa frase «cursi») o de comodidad (temperatura, iluminación, etc.). Todo esto te ayuda a mantener la concentración y a aumentar la productividad.
• Ahorro de tiempo y dinero: vas a ahorrar tiempo en los desplazamientos y en los descansos de las jornadas partidas. Así, tendrás más tiempo para tus cosas (ejercicio, amistades, compromisos, formación, descanso…). Además, ahorras dinero tanto en gastos de transporte público o combustible como en comidas fuera de casa. Aunque debes tener en cuenta que los gastos de casa aumentarán un poco.
• Mejor estado de ánimo y menos estrés: todo lo anterior ayuda mucho a reducir tu estrés. ¿Cómo? Evitas situaciones estresantes y puedes dedicarte más tiempo a ti y a cosas que te hacen sentir bien. Como consecuencia, también estarás más a gusto en tu trabajo.
• Libertad geográfica: es uno de los mayores beneficios del teletrabajo, ya que te permite ser nómada digital o no serlo como tal, pero trabajar desde donde quieras.

Contras de trabajar en casa

A pesar de que nos gusta ver siempre el lado positivo, trabajar en remoto también puede tener algunas desventajas. Te las contamos para que estés al tanto.

• Aislamiento social: la falta de interacción cara a cara con colegas de trabajo puede ser un desafío para algunas personas. Quizás llegues a sentirte solo/a o desconectado/a y, más aún, si no vives con nadie. Por ello, es importante mantener el contacto con otras personas fuera del trabajo. También influye la cultura de la empresa y que haga por que todos los trabajadores/as se integren bien (con team buildings, por ejemplo).
• Dificultad al poner límites entre trabajo y vida personal: o conciliación laboral. Cuando tu hogar es tu oficina, puede resultar difícil desconectar y poner límites claros. No caigas en la tentación (o presión) de seguir trabajando fuera del horario laboral y evita acabar teniendo el síndrome del burnout.
• Menor colaboración y comunicación cara a cara: no interactuar de forma directa con colegas de trabajo puede dificultar la colaboración en equipo. Las videollamadas y las herramientas de colaboración en línea son útiles, pero no siempre replican la experiencia en persona. Por eso, es importante encontrar formas efectivas para colaborar con tu equipo de trabajo.
• Distracciones domésticas: en lugar de las distracciones típicas de la oficina, pueden surgir las de casa (mascotas, tareas del hogar pendientes, si vives con otra persona y te distrae…). Pueden afectar a tu concentración y productividad, por lo que es recomendable que las identifiques y tomes medidas para minimizarlas.

Tienes más ejemplos de desventajas o errores que se suelen cometer al teletrabajar y consejos sobre cómo evitarlos en este vídeo.

Conciliación familiar al trabajar desde casa

La conciliación familiar se entiende como la facilidad para que los adultos de una familia puedan equilibrar el desempeño de su trabajo con el cuidado de hijos menores o de personas dependientes.

Sin embargo, no solo estas personas tienen el derecho a conciliar. Aquellos trabajadores y trabajadoras que no tienen a nadie a cargo también merecen tener un equilibrio entre vida laboral y personal.

Dicho esto, el trabajo remoto es una forma muy buena de poder conciliar, pero hay que tener cuidado y saber organizarse para que no pase todo lo contrario. En este sentido, te damos algunos consejos:

• Si tienes hijos/as, organiza tu jornada laboral en torno a sus horarios: si van al cole, intenta estructurar tu jornada en torno a sus horarios escolares para que puedas sacar más tareas adelante.
• Comunica tus expectativas: habla con tu familia o las personas con las que vives sobre tus responsabilidades laborales y lo que necesitas para desempeñar bien tu trabajo. Explícales que, aunque estés en casa, estás trabajando y necesitas concentrarte.
• Fomenta la autonomía: si tienes hijos/as, establéceles rutinas claras durante tus horas de trabajo. Anímales a que hagan cosas de forma independiente o que hagan actividades que no requieran tu supervisión constante.
• Sé flexible: acepta que habrá momentos en los que necesitarás ajustar tu horario o interrumpir tu trabajo para atender las necesidades de tu familia. Mantén una actitud flexible y adapta tu rutina según sea necesario. Intenta no frustrarte.
• Establece límites: es importante establecer límites claros entre el trabajo y la vida familiar o personal. Apaga el ordenador y desconecta del trabajo al final de la jornada laboral para poder dedicar tiempo de calidad a tu familia o amistades.
• Cuida tu bienestar: del mismo modo, no descuides tu salud física y mental. Dedica tiempo a hacer ejercicio, relajarte y pasar tiempo de calidad con tus seres queridos. Al final, una persona feliz y sana será más productiva en el trabajo.

Consejos para teletrabajar de forma eficaz

Cada persona es un mundo. A unas les cuesta más adaptarse a este estilo de vida y otras han nacido para ello. Estés en el lado que estés, siempre viene bien repasar algunos consejos para intentar que tu situación laboral sea lo mejor posible en cuanto a productividad, comodidad y conciliación.

1. Organiza tu día

Aunque no ir a la oficina es una de las mayores ventajas de este tipo de trabajo, es cierto que la rutina diaria que genera puede tener algunos aspectos positivos.

Por eso, te recomendamos que intentes organizar tu jornada laboral. Esto no quiere decir que cumplas al minuto cada tarea o bloque de trabajo que te hayas propuesto. Pero sí que te habitúes a empezar y acabar más o menos a la misma hora.

Dentro de este horario, intenta dividir y organizar las tareas del día en diferentes bloques. Puedes usar herramientas como Google Calendar, Notion Calendar o cualquier otra similar que te guste. Esta organización te dará paz mental y te ayudará en tu productividad.

Además, es aconsejable que, antes de ponerte a trabajar, te prepares para ello. Es decir, no te pongas a trabajar nada más abrir los ojos. Despéjate, aséate, vístete y desayuna (si eres de las personas que desayuna).

Lógicamente, si eres nómada digital y viajas con mucha frecuencia, esto puede ser más difícil de cumplir. Aún así, sería interesante que intentaras llevar cierta rutina.

2. Acuérdate de descansar

En relación al punto anterior, es muy importante que también incluyas descansos en tu jornada laboral. Al trabajar desde casa, puedes tender a centrarte mucho en una tarea y olvidarte de descansar.

Para evitarlo, incluye en tu calendario bloques de descanso. Puede parecer una tontería, pero tener esas pausas programadas y verlas en tu agenda diaria te servirá de recordatorio. No es necesario que sean pausas largas, pero levantarte de la silla de vez en cuando, estirar las piernas y moverte un poco te vendrá muy bien física y mentalmente.

3. Ten tu espacio de trabajo

Otra recomendación muy importante es que tengas tu espacio de trabajo separado del resto de «zonas» de tu vida personal.

Es decir, si tu situación te lo permite, dedica una habitación de casa a que sea tu oficina. Si no tienes espacio para dedicar una habitación completa, puedes buscar un hueco en una habitación y tener ahí tu rincón de trabajo.

Lo que debes evitar es trabajar tumbado en el sofá o en la cama, por ejemplo. Esos no son espacios de trabajo, son de ocio o descanso personal. Y, cuando trabajas en casa, es muy importante que los separes bien para que tu mente pueda descansar del trabajo.

4. Interactúa con otras personas

Por último, como hemos comentado en la sección de «Contras de trabajar en casa», es posible que te sientas un poco solo a lo largo del día, sobre todo, si no convives con nadie.

Por eso, es muy recomendable que hables con otras personas y no solo con colegas de trabajo. Aprovecha los descansos para entablar alguna conversación con familiares o amistades. También es bueno que te planifiques actividades sociales que te permitan interactuar con otras personas (deporte, clases presenciales, tomar algo con amigos…).

¡No te encierres en tu cueva! A la larga, puede acabar pasándote factura mental y físicamente.

Esta es toda la información que te podemos contar sobre trabajar desde casa y lo que implica. Esperamos que te sirva de ayuda para lanzarte y probar esta modalidad de trabajo.

¿Has dado el paso ya a trabajar desde casa? ¿Cuál es tu experiencia y qué puedes recomendar a otras personas que quieran empezar una vida más libre?

¡Te leemos en los comentarios!